miércoles, 10 de mayo de 2017

Invisible

I've got an aching head
Echoes and buzzing noises
I know the words we said
But wish I could've turned our voices down
This is not black and white
Only organize confusion
I'm just trying to get it right
And in spite of all I should've done

I was not mad at you
I was not trying to tear you down
The words that I could've used
I was too scared to say out loud
If I cannot break your fall
I'll pick you up right off the ground
If you felt invisible, I won't let you feel that now

Invisible
Invisible
Invisible
Invisible

You didn't get your way
And it's an empty feeling
You've got a lot to say
And you just want to know you're being hurt
But this is not black and white
There are no clear solutions
I'm just trying to get it right
And in spite of all I should've done

This is not black and white
There are no clear solutions
I'm just trying to get it right
And in spite of all I should've done

I was not mad at you
I was not trying to tear you down
The words that I could've used
I was too scared to say out loud
If I cannot break your fall
I'll pick you up right off the ground
If you felt invisible, I won't let you feel that now

Invisible
Invisible
Invisible
Invisible
Invisible
Invisible
Invisible
Invisible

sábado, 6 de mayo de 2017

Sensaciones

¿Sabéis esa sensación de que ha pasado algo muy malo? ¿Incluso que es culpa vuestra? Sin haber hecho nada, o al menos tener conciencia de ello. Así estoy yo ahora.

Es una sensación que se apodera de mi, sin quererlo. Además de otras sensaciones, no menos desagradables. Dolor de cabeza es lo que me provoca todo ello. Siempre intento tenerlo todo controlado, es uno de mis defectos. Y cuando no puedo, me ofusco. Es algo que tengo que cambiar, claro.

También tengo la sensación de que ha pasado algo que no se me ha dicho (fuera aparte de la anterior). Posiblemente para no hacerme daño, porque no sepa esa persona la forma de explicarme el por qué ha pasado, o bien simplemente porque no crea que sea el momento de que lo sepa. Pero esa sensación es cada vez más fuerte. Y viene de largo. Quizás, lo más probable, es que sean paranoias mías.

Pero, ¿y si no? ¿Y si (como en otras ocasiones) tengo razón? Me paso la vida con los "¿y si...?" en la cabeza. Lo he dicho muchas veces, pero realmente necesito un pensadero. He cambiado en muchos aspectos, tanto de pensamiento como de mi forma de ser. Pero hay cosas que se resisten a cambiar. Y precisamente con esas cosas debo esforzarme más para que se cambien. Para que las cambien.

Ahora que lo pienso, no sabría decidir si prefiero que me lo dijese o seguir viviendo en la ignorancia. A saber qué consecuencias tendría cada cosa xD.

En fin, dejo de divagar. Que siempre lo hago.

Hasta más ver.

jueves, 20 de abril de 2017

El Gran Día

En unas horas, me presento a la prueba de acceso a la universidad para mayores de 25 años. Sí, así de loco estoy.

Ahora en serio. Ése examen es un salto que doy en los pasos a seguir para estudiar la carrera de Psicología. Mis amigos, me han apoyado. Ella, me ha apoyado, impulsado a presentarme a éste examen, y por supuesto motivarme para ello.
He tenido sólo cinco semanas para prepararme la prueba. Llegando por la tarde/noche a mi casa, ducharme y tirar para la biblio. O bien estudiar en casa. Durmiendo si acaso 6 horas. Y al día siguiente, otra vez a currar.

Me voy a presentar, y haré los exámenes lo mejor que pueda. Me esforzaré. Y, claro, ¿qué pasa si suspendo? Absolutamente nada. Eso pasa. ¿Por qué? Porque tengo el año que viene para subir nota. Contaré con más tiempo y así sacaré notaza.

Obviamente me vendré abajo si suspendo, pero pensaré en lo que he dicho arriba y todo irá bien.

Hoy, tres exámenes. El sábado, otros dos. Espero no morir en el intento. En fin, que veremos qué pasa.

Hasta más ver.

sábado, 25 de marzo de 2017

De vergüenza

Posiblemente este no sea el sitio más idóneo para hablar de esto. Pero si no digo algo, reviento.

Pasó en agosto, lleva desde entonces de baja en el trabajo. Estuvo a punto de morir. Es tu puñetero hermano. Y, ¿no eres capaz de coger el puto metro o de decirle a tu marido que te acerque a verle? No es tan difícil. Quedaste muy bien yendo al hospital, soltando lagrimitas y poco más. No digo que no te doliera o te preocupases en ese momento, pero solo duró ahí. Ni tus hijos llaman para preguntar por él. Que tu madre te intente excusar sabiendo que no tienes defensa. Porque os quiere a los dos. Pero no eres capaz ni de mover el puto culo para llamarle por teléfono más de una vez cada dos meses.

Que tienes la parada de metro al lado de casa literalmente, ¿eh? No sé cómo puedes, podéis mejor dicho, estar tan tranquilos. Pero nada, tú sigue en tu puñetera casa. Que ahí estás muy bien.

Perdonad esta entrada, pero necesitaba escribirla.

Hasta más ver.

miércoles, 1 de marzo de 2017

Shut up and take my money!

Todos fantaseamos con que alguna vez nos toque la lotería. Millones en nuestra cuenta bancaria que nos permita hacer lo que queramos, comprar lo que queramos. Y yo, obviamente, también sueño eso.

Llevo trabajando como auxiliar de topografía desde el 6 de junio de 2016. Si, el día 6, del mes 6, del año 2016. Tiene narices, ¿eh?. En fin, que eso. Es un trabajo duro pero, a fin de mes, lo agradezco. Eso si, madrugar de lunes a viernes y llegar a casa reventado, no mola nada. Pero para qué mentir, ya me he acostumbrado a ambas cosas. Y diréis: "¿Qué leches tendrá esto que ver con la lotería?". Ahora voy, impacientes.

A menudo me pongo a fantasear con eso, con que me toque la lotería. Con las cosas que compraría... Y de repente, caigo en el tema del trabajo. ¿Realmente lo dejaría? La respuesta más rápida es un SI como una catedral. Pero, vamos a pararnos un momento a pensar. Si, en mi caso lo de pensar cuesta más trabajo por falta de práctica xD.

Con parte del dinero que me tocaría, contrataría a profesores particulares para poder quitarme de en medio ya bachillerato (25 años y sin bachiller T.T), bien directamente la PAU (la prueba para el acceso a la universidad, para los menls avispados que no lo entiendan). Que aun así con esto último me estoy poniendo a ello. Pero con profesores, tendría más... Ayuda o motivación, como lo queráis llamar.

Bien, una vez que hubiera aprobado el examen, me gustaría estudiar psicología. Concretamente psicología criminal. La mente humana siempre me ha fascinado. Y, ¿qué mejor mente para investigar que la de un criminal? Supongamos que todo esto sale bien y demás. En todo el camino que hay desde aprobar el exámen hasta sacarme la carrera, algo más tendría que hacer. Sí, estudiar para todo ello. Pero por mucho que yo quisiera mantener un horario para estudiar y demás quehaceres, me lo acabaría saltando. Mi descontrol con el horario sería caótico, y eso no lo quiero. Además que me acabaría aburriendo, lo más probable.

Qué si, que leéis esto y diréis: "que sí, chaval. Que el trabajo lo dejarías. No me cuentes historias. No vas a madrugar para ir a un trabajo que desgasta mucho físicamente teniendo un pastizal en el banco". Puede ser. Sinceramente no lo sé. Quiero creer que no lo dejaría. El trabajo me ha creado un horario, una rutina. Algo que hacer, a fin de cuentas. No sé... Seré raro. Ni yo mismo me entiendo muchas veces.

En fin, que me enrollo como siempre. Tengo que mejorar eso bastante, entre otras cosas. Pero es que me enrollo hablando en persona y también por escrito. Soy un desastre xD.

Bueno, que buenas noches y esas cosas.

Hasta más ver.

lunes, 20 de febrero de 2017

Importancia y esfuerzo

Soy de los que piensa que no se hace a la gente feliz a base de regalos y no hechos. Y no porque algo sea caro, es mejor.  Obviamente. Pero, también me encanta ver la cara de felicidad y sorpresa de la gente a la que regalo.

Éstas navidades, aprovechando que tenía dinero por mi trabajo, decidí que mi familia tuviera unas navidades con unos regalazos. Porque se lo merecían, y eso hice. Me puse a pensar en los regalos adecuados para cada uno, y los compré. Me echaron la bronca cuando se los dí por la cantidad de cosas y por el precio que habrían costado. Pero no me importó,  en cuanto vi sus caras de felicidad y las lágrimas de mi padre, me di cuenta de que hice lo correcto.

Después de navidades, he seguido regalando a gente a la que quiero. Aunque fuesen detallitos, pero quería hacerles feliz.

Intento poner atención, comerme la cabeza por saber qué puede hacer feliz a la persona. Ya sea material o no material. Siempre lo he hecho o al menos lo he intentado. Y me jode que la gente no tenga esos mismos detalles. Que se preocupen más por sí mismos o bien por gente que no merece tanta atención. Será un deseo caprichoso, pero me gustaría que la gente se preocupase por mí igual que hago yo con ellos. No con esto quiero decir que deben regalarme cosas. No quiero que se me malinterprete, que suele pasar por lo mal que me explico. Lo que quiero decir es eso. La misma preocupación que pongo en los demás, que sea algo recíproco.

¿Es mucho pedir? Creo que no. Obviamente, jamás hago las cosas esperando algo a cambio. Jamás. Pero es como cuando haces bien un trabajo o bien sacas una notaza, y te dicen "es lo que tienes que hacer", en lugar de animarte o felicitarte. No sé, me explico fatal y seguro que toda ésta entrada se entenderá de la manera que no quiero o pretendo. Pero bueno, estoy acostumbrado a ello.

Acabo de caer que ni he saludado después de tanto tiempo. ¡Hola! ¿Todo bien? Espero que si. Ea, ya he cumplido.

Como iba diciendo, me preocupo demasiado por la gente, esperando el mismo trato. Y luego llegan las decepciones. Tengo un tweet fijado al que nunca hecho cuenta. Porque es un gran consejo, y no lo sigo ni aunque me paguen. Como siempre, doy consejos pero no sigo los mios. Absurdo, ¿no?

Debería despedir ya ésta entrada, que acabaré enrollandome demasiado y acabaré aburriendo, si no os habéis aburrido ya. Que suelen decir que me enrollo. Pero no tanto, osea... Mierda... Ya me estoy enrollando, ¿no? 😅. Me voy ya xD

Hasta más ver.

jueves, 8 de diciembre de 2016

Tu reino por mis pensamientos

Llevo demasiados días (quizás semanas) pensando en ti. Mirando tu foto, o tu estado de WhatsApp. Ver si hay cambios o no. Incluso tu instagram, aunque no pueda verlo. Lo único que no miro es tu blog porque sé que lea lo que lea, me hará daño. Y ésto no es tu culpa directamente, ¿eh? Es mía por tomarme las cosas de otra manera. Esperar que algún día escribieras algo por mi, y cuando lo hacías eran cosas malas o cosas que me dañaban.

En cuanto has llegado a mi segunda o tercera frase has tenido que saber que me refiero a ti. O incluso nada más entrar. Hace tiempo que no escribo porque sólo sería hablando de ti. Y no quería. Cualquier sentimiento referente a tu persona, lo reprimía. Aunque a veces no pueda evitar tuitear algo de ti o para ti. Quizás esperando que lo leyeras o reaccionaras. Un pensamiento muy infantil, lo reconozco. Pero ya me conoces, soy así.

Muchas veces me he grabado en audio hablando de estos temas. De ti o de cómo me siento. Incluso he llegado a grabarme con la cámara, aquella que me regalaste. Todo esto para analizarlo en el futuro. O simplemente para reflexionar acerca de cómo estaba en ése momento. Ninguno de esos archivos verá jamás la luz.

Probablemente me arrepienta de escribir esta entrada. Probablemente quiera borrarla. Y probablemente ni la leas, ya que dijiste a principios de noviembre que ibas a dejar de buscarme en redes sociales (incluido esto, supongo). Me prometí a mi mismo hacer lo mismo, pero sólo lo he conseguido con tu blog. Y ya bueno... Supongo que no he podido reprimirme más y he decidido desahogarme aquí.

No confío en que me leas. Ni los de tu entorno. Simplemente escribo esto para eso, desahogarme. Y también para decirte que te echo de menos más de lo que me gustaría. Que muchas veces desearía tenerte a mi lado, contarte mis comeduras de cabeza. Pedirte ayuda cuando me viera demasiado agobiado. Dormirme abrazado a ti. Provocarte esa sonrisa que siempre me ha encantado. Todo eso, pese a todo.

Es para tortearme la cara, lo sé. Pero reprimirse nunca es bueno. Acaba uno explotando.
Querría sacarte de mi cabeza, pero me siento incapaz.

Las cosas son más distintas de lo que vemos o leemos. Y las frases que escribimos en cualquier sitio, se malinterpretan. Bueno, y lo que no son palabras, también. Esto último seguramente sólo lo habré entendido yo. O quizás tú también.

Creo que ésta es la entrada más larga que he escrito. Supongo que pasará un tiempo hasta que vuelva a escribir. Según en las circunstancias en las que me encuentre.

Hasta más ver.